Impacto de los puzzles en el desarrollo de los niños

El juego en el desarrollo infantil es una de las partes más importantes en las que se debe incidir. Está más que demostrado que el juego en los niños aportan mucho más que solo diversión.

Los más pequeños aprenden y se relacionan a través del juego, desde los primeros meses de vida en adelante, el juego es clave para su capacidad de entender y relacionarse con el mundo.

El juego es especialmente importante para potenciar el desarrollo cognitivo de los niños, potenciar ciertas habilidades que les ayude a mejorar sus cualidades cognitivas.

Para ello existen determinados juegos perfectamente diseñados para estimular ciertos aspectos. Los puzzles son, con toda probabilidad, uno de los juegos que les ayudan a desarrollar sus habilidades cognitivas.

Veamos, con un poco más de detalle, la importancia de los puzzles en el desarrollo de los niños, descubriendo que los puzzles son un verdadero tesoro para aportar a su mundo.

¿Qué son los puzzles?

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Realmente todos sabemos dar forma y significado a lo que es un puzle, pero si buceamos en su significado descubriremos todo el potencial que poseen.

Los puzzles son juegos, problemas o juguetes que ponen a prueba el razonamiento e ingenio de una persona.

Ante un rompecabezas se espera que la persona junte las piezas de manera lógica para llegar a la solución correcta o divertida del rompecabezas.

Existen una gran variedad de puzzles cuyo objetivo es estimular el pensamiento lógico. Son juegos muy valorados, sobre todo en la etapa temprana de los niños por todo el potencial que les aporta.

Un puzzle para niños es una gran alternativa de juego para todas las edades, desde los primeros años hasta una edad más madura. La capacidad de atención y paciencia que le aportan al niño tiene un valor significativo.

¿Para qué sirven los puzzles?

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Como ya hemos comentado, los puzzles no son solo divertidos, además tienen un efecto positivo en nuestros procesos mentales.

En los más pequeños, cuando juegan con rompecabezas, entrenan su motricidad fina y sus habilidades cognitivas.

El impacto de los puzzles en el desarrollo de los niños es brutal, veamos para qué sirven los puzzles en el juego de los niños ¡Toma nota!

En primer lugar, es necesario comentar que los niños pueden comenzar a jugar con juegos de rompecabezas/puzzles entre los 12 y 18 meses.

Aunque esto es tan solo una medida estándar, todo depende del desarrollo y capacidad individual de cada niño.

En el momento que el niño pueda coger cosas con facilidad, diferenciar formas y tenga una mayor inclinación a explorar y buscar, puede decirse que su hijo está preparado para los puzzles.

Una cosa muy importante es que no se debe forzar la introducción del juego del puzzle, pues puede ser contraproducente para su desarrollo e incluso crear una frustración no deseada.

Veamos algunos de los factores claves que un puzzle fomenta en el desarrollo cognitivo de los más pequeños:

• Los puzzles desarrollan habilidades de resolución de problemas y pensamiento crítico del niño, ambas cruciales para el dominio de otras cualidades clave en el futur
• Son ideales para practicar y entender el reconocimiento de patrones, memoria y las habilidades motoras gruesas y finas.
• En términos generales, los puzzles potencian la resolución de problemas que le causan dificultad, sin darse por vencido, aplicando la paciencia y la tenacidad.

Todo ello, son habilidades fundamentales para el óptimo crecimiento e interacción con el entorno que les rodea a los niños.

Existe una amplia colección de juegos de puzzles para todas las edades. A la hora de escoger un puzzle para nuestro hijo, solo es necesario cumplir con una recomendación: adquirir aquel puzzle ideal para su etapa evolutiva actual.

No es nada recomendable comprar puzzles de etapas evolutivas mayores que las del niño, solo en casos particulares se debería hacer esto.

Una vez seleccionado el puzzle para tus niños, es muy importante el proceso de integración del juego. Es necesario y muy importante dejar al niño explorar el juguete. El niño ha de reconocer las piezas y relacionar formas y colores por el mismo.

Luego y dependiendo de su edad, se puede hacer un proceso de guía positivo, siempre sin forzar al niño a hacer cosas que no entienda o no quiera. Con el paso del tiempo, el niño entenderá el objetivo del puzzle, siendo una motivación la resolución propuesta por el juego, ofreciendo diversión por mucho tiempo.

Recuerda, existen diferentes tipos de puzzles, escoge aquel que mejor cubra las necesidades de tu niño.